“La muerte es solo un síntoma de que hubo vida.”
Mario Benedetti
Día de Muertos, una celebración a la memoria y un ritual que privilegia el recuerdo sobre el olvido. A mi llegada a la ciudad de Cancún una de las cosas que atrapo mi atención es el culto que tienen los ciudadanos mexicanos a conservar sus orígenes Mayas como parte de su historia. Es apasionante el rescate de las tradiciones y rituales indígenas a lo largo de todo el territorio del país. Cada región con creaciones y variaciones particulares entre ellas, caracterizan y dan vida propia a la cultura en su comunidad.
El día de los muertos, es una tradición que trasciende en el tiempo y con anticipación a esa fechas la gente se prepara con alegría a esta celebración cumpliendo con el ritual de la creación de altares que honran a sus desaparecidos que a diferencia de otras culturas y religiones, en la tradición indígena maya, las animas de los difuntos regresan a casa para compartir con sus familiares y nutrirse de los alimentos preparados con amor en su honor.[1]
La casa de la cultura de Quintana Roo, el pasado viernes 29 de octubre de 2020, organizó una conferencia con un historiador e investigador Maya hablante: Ismael Briceño[2]. En la misma hizo un recorrido de la celebración del día de muertos Maya. En la misma, destaca como la cultura mexicana en las que convergen 68 lenguas a raíz del proceso de transculturización con la llegada de los españoles, las prácticas culturales se diversifican especificando, como dentro de la misma península de Yucatán hay su variantes en las prácticas y rituales culturales. Resalta que el oriente de Yucatán, Quintana Roo, La muerte es parte del ser mismo y como dualidad esta presente todo el tiempo. Entre los rituales, diferencia el encender velas para que se iluminen en el camino de regreso en los adultos, y para los niños se dejan pétalos de rosa. Exalta la cantidad y variedad de alimentos y la presencia de otros rituales durante todo el mes de Noviembre.
La muerte como ausencia, es símbolo de vida, el alma del muerto se retira a descansar, es decir, hay una continuidad, hay un regreso, y con ello el mensaje que penetra la piel, a la muerte no se le teme, se convive con ella, unos se adelantan pero vuelven y los que quedan los recuerdan mediante el acto del ritual. Es un día de festejo de color, alegría y arte.
[1] https://www.gob.mx/inafed/es/articulos/dia-de-muertos-tradicion-mexicana-que-trasciende-en-el-tiempo?idiom=es
[2] Briceño, Ismael., Maya hablante. Profesor investigador intercultural Maya de la universidad Municipio José María Morelos. Coordinador de la lengua y desde Marzo 2020, Secretario de la lengua Maya de Quintana Roo.